viernes, 8 de agosto de 2008

LA VERDAD DE LA HAMBURGUESA

Veo la M colgando
Con fuckin-crosty el payaso
Veo que viene el caballo
Con el cowboy con el lazo
Empaquetado en abrazos
Empalagado de besos
En tres d dice:”progreso,
Aproveche es una ganga”
Los ojos van a la tanga
Y la tele es como un rezo.

(Empleado del mes, Abuela Coca)


Titulo de La Republica:


La republica, con el nivel de sensacionalismo al mango, nos dice “…fue forzada a exhibir la verdad…” y uno lo primero que le viene a la mente son todas aquellas historias de las lombrices… Claro que abajo del titulo se aclara de que viene la mano, pero la primera impresión creo que no tiene otra intención.

Pero… ¿De que se trata esto?

Los clientes de la cadena de comida chatarra en Nueva York enfrentan desde ayer, finalmente, la verdad acerca de sus opciones alimentarias, ya que la famosa Big Mac tiene 450 calorías.

Nahh!! ¡¿Era esto?! Te ponen esos titulares y uno piensa que se viene una bomba como la desclasificación de archivos de la CIA. Ríase de los expedientes X. Y resulta que es algo que todos sabemos. ¿La Big Mac engorda? ¡Uy!, pero que sorpresa.
Utilizan un “finalmente, la verdad” como si estuvieran hablando de los desaparecidos de la dictadura.


Tras meses de resistencia, la popular cadena de restaurantes comenzó este lunes a someterse a la primera regulación en su tipo, jamás emitida antes, que obliga a indicar directamente la cantidad de calorías en el menú. McDonald's y Burger King estuvieron entre las cadenas que publicaron nuevas tablas de menú impresas con la información de calorías, también exhibida al frente y centro de cada caja registradora. Los inspectores de salud de Nueva York han puesto manos a la obra: los restaurantes de comida rápida que todavía no indicaban de forma precisa el número de calorías de cada plato están recibiendo notificaciones para poner al día sus menús de forma inmediata. Las multas van de 200 a 2.000 dólares.

Bueno… esto esta bien… en particular para saber cuantos “yogurcitos” hay que tomarse después para balancear la dieta.
No se como el gobierno en su loco afán de regularlo todo (porque sabemos que lo de antes era un relajo, pero ya se les va un poco la mano) todavía no ha echado cartas en el asunto. A nadie le interesa, pero si lo hacen en el primer mundo, lo hacemos nosotros.





Si somos lo que comemos, soy conservante, soy peligroso. Soy bastante artificial. Artificial. ¡Hermano ta’ salao!” (Ta salao, Abuela Coca).





Los restaurantes alegaban el "problema" de que tanta información dificulta la lectura de sus productos, además de violar su derecho a la libertad de expresión

¿Libertad de expresión? ¿Pero de que hablan? ¡Están de vivos! Al final La Republica tiene razón…

Y el monstruo avanza devorando todo, como un virus terminal
Y hasta en Somalia ya tiene su sucursal
Yo me voy al bar

MC DOLAR, AY AY AY AY AY [X3]
ME NIEGO A COLABORAR

Y este negocio tan mezquino y ladrón, de una forma puede terminar
Es la explotación del trabajador que ves tras ese mostrador
Visto lo visto yo me piro de aquí, y que venga la guardia civil
Acompáñame, te invito a ingerir, las tapas del bar de Fermín.

(Mc Dólar, Ska-P )

“El bar de Fermín” en nuestro país no son otra cosa que los carritos. Ya me dieron suficiente manija… ¡no voy más a Mc Donald’s!
Y si a alguien todavía le quedan ganas, los invito a ver el siguiente video:








En nuestro próximo artículo vamos a proponer una batería de medidas para proteger y promover algo tan sano y nuestro como el carrito.

El_Hincha

(Este post va dedicado para el Tuki, quien cumple años este 10 de Agosto. Y quien en un acto de rebeldía anti-capitalista extrema, cuelga en la pared de su casa, cual trofeo de guerra, una M de Mc Donald’s sustraída en las propias narices del payaso Ronald)

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